“MEMORIAS VIVAS DEL REDENTOR”
Primer bloque del itinerario de formación permanente
Villa Allende – Córdoba – Argentina – 11 Al 14 De Julio De 2019
Con gran alegría queremos compartir con todos que concluimos el Primer
bloque del itinerario de formación permanente para laicos. El mismo se
realizó en nuestra casa de Villa Allende (Córdoba) – Argentina, del 11
al 14 de julio.
Este itinerario responde a la inquietud y necesidad de los laicos de
formarnos para responder a los desafíos del mundo herido y caminar
juntos en la misión compartida.
La dinámica de este primer bloque fue recordar y profundizar en la vida
de Alfonso. Por las tardes y, a la luz de sus vivencias, miramos nuestra
propia vida y nuestro caminar como redentoristas. Al terminar cada día
celebramos la Eucaristía y recogimos, con memoria agradecida, lo
reflexionado y vivenciado.
P. Marcelo Pomar, Provincial de Buenos Aires, junto al equipo formado
por dos sacerdotes, tres laicas y una Hermana Redentorista.
El primer día (recordar), luego de la presentación, recorrimos la vida
de Alfonso desde Marianela hasta los Tribunales, profundizando en los
elementos de su época, aportando datos biográficos y la relación de éste
con Dios, su familia y amigos y con él mismo. Por la tarde, nos
reconocimos en un cambio de época y buscamos signos de Dios en este
contexto.
El segundo día (ver), recordamos el tiempo de Alfonso desde el juicio
hasta su ingreso al seminario. Al comenzar la tarde, el Padre
Provincial, Marcelo Pomar, nos sorprendió muy gratamente con un saludo
del Padre General Michael Brehl, en el que nos alentó en este nuevo
camino de formación en sintonía con la misión compartida, poniendo
énfasis en el protagonismo de los laicos.
Seguidamente, Macarena Sarmiento, laica redentorista, nos compartió lo
vivido en la VI Asamblea de la Conferencia de América y el Caribe.
Por la tarde, reflexionamos a la luz de La Espiritualidad desde abajo,
de Anselm Grün y, para finalizar, dialogamos acerca del Mensaje final
del Capítulo General.
El tercer día (rezar), recordamos el caminar de Alfonso desde el
seminario hasta Scala, pasando por las capillas del atardecer, el
Colegio de los chinos, las misiones antes de Scala. Para finalizar la
mañana y, por comunidad de origen, vivenciamos las capillas del
atardecer: un momento hermoso de oración compartida. Por la tarde, vimos
los modelos eclesiales y el rol del laico. Por la noche disfrutamos
canciones de Alfonso que sirvieron de preparación para la última mañana
del itinerario, que quisimos fuera de oración, silencio y adoración
durante la celebración de la Eucaristía. Así, frente a nuestra Madre y,
pidiéndole que no deje de mirarnos, nos confiamos a su Perpetuo Socorro
y cerramos el Primer bloque del itinerario de formación permanente para
laicos.
Con la certeza del inicio de un largo y esperado sueño, volvimos a
nuestras comunidades con el compromiso de compartir lo vivenciado.
Unidos en la oración pidámosle al Espíritu Santo que guíe los caminos
para la misión compartida, que es lo mismo que decir, para anunciar
juntos el amor redentor y siempre fiel de nuestro buen Dios. Un saludo
entrañable desde Argentina.
Cintia Cajal
(Por el equipo de Formación)
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